Cuando era alumno en la universidad un
profesor nos hizo esta misma pregunta. Lo cierto es que hasta ese
momento nunca antes me lo había planteado pero es verdad que desde
entonces esa misma cuestión me ha rondado la cabeza en numerosas
ocasiones y circunstancias de mi vida: ¿estoy siendo pavo o águila?
El interrogante no es nada fácil de
resolver porque realmente ¿que significa ser pavo o águila? Parece
que, en una primera aproximación, la cosa pasa por fijarse en cuáles
son los estilos de vida de una y otra ave. A mi por ejemplo se me
ocurre la siguiente comparación: El pavo no tiene que preocuparse ni
correr riesgos para conseguir una sustanciosa comida a diario porque
se la proporcionan. Por otro lado, el águila tiene que salir al
campo y exponerse a los peligros del mundo para conseguir un bocado
por sí misma.
La vida del pavo parece realmente una
vida muy apetecible ¿no es cierto? Sin embargo, la anterior
comparativa da lugar a muchas otras cuestiones porque por ejemplo:
para mantener el estatus quo el pavo depende de la mano que le da de
comer mientras que el águila no depende de nadie. Este es un punto
muy interesante porque ¿qué pasaría si de repente la persona que
alimenta al pavo dejara de ir? ¿Sería el pavo capaz de sobrevivir
sólo en el corral? Y Si decidiera saltar las vallas y salir al mundo
¿Estaría preparado para sobrevivir a los peligros que le rondarán
ahí afuera?
Además hay otra cuestión muy
interesante pues fíjense que las oportunidades del pavo se limitan a
la comida que cae en su corral. Si en su corral, por ejemplo, la
comida fuera asquerosa o incomible no tendría la oportunidad de
cambiar de vida a no ser que la mano que lo alimenta así lo
decidiera. El águila, por su parte, no tiene ese problema porque
puede moverse de un sitio a otro y buscar lugares donde pueda haber
mejores oportunidades de caza y mejores piezas (o no).
En un plano un poco más transcendental
se plantea otra comparativa muy, muy interesante porque ¿cuál es la
finalidad de una y otra vida? En el caso del pavo la cosa está muy
clara porque en esta vida nadie nos da nada gratis. Sin duda el pavo
va a terminar en el horno de aquel que lo está cebando. La vida del
pavo sirve pues únicamente a los intereses de aquel que lo está
alimentando. Pero ¿y la del águila? ¿cuál es la finalidad de la
vida del águila? Esta perspectiva es un poco más difícil de
alcanzar pero, sin duda alguna, la vida del águila sirve para
mantener el equilibrio del ecosistema en el que habita.
Visto lo anterior y aunque nunca es
nada fácil, a mi personalmente me agrada la sensación de pensar que
soy capaz de vivir como un águila en todos los aspectos de mi vida,
que no dependo de nadie (que yo no deseo) para vivir y tomar mis
propias decisiones, que mi vida contribuye a mantener el equilibrio
de las cosas y que mis oportunidades dependen de mis propias
habilidades y conocimientos. Y aunque esto no soy siempre capaz de
conseguirlo, si es cierto que desconfío de todos aquellos que
quieren hacerme vivir la vida del pavo. ¿Y ustedes?